miércoles, 14 de diciembre de 2016

Juego sin fin

Supongo que tenías razón, yo también te mentí. Te dije que no esperaba nada y era una total y completa mentira. Ahora lo que quiero es que te vayas, como siempre has hecho. Que salgas corriendo lejos de mi vida, cuando fuiste vos el que quisiste volver a entrar en ella. Te conozco tanto como para saber que vas a volver y este juego sin fin va a volver a empezar. Ambos sabemos que jamás se va a acabar. Pero estoy muy cansada. Estoy cansada, agotada, frustrada. Desearía que esta ruleta rusa sin corazón se detenga de una buena vez. Tengo veintitrés años, y llevo cinco enamorada de una persona. Quiero pensar que ya ha sido suficiente. Tengo un montón de cosas que se me cruzan por la cabeza y siento que no merece el esfuerzo decírselas. Supongo que ya debería estar curada de espanto, pero sigo insistiendo. Estoy cansada de pensar que algo va a cambiar y de esperar algo que jamás va a pasar. Jamás vas a valorarme como lo merezco. Jamás vas a arriesgarte. Jamás habrá un nosotros de verdad, y mucho menos un futuro juntos. Quiero rendirme de una buena vez por todas y no puedo. Algo en mi se niega  a aceptar que no hay manera de que funcione. Lo único que he descubierto después de todo este tiempo es quién es el que pone los palos en la rueda. Después de mucho pensar que todo era mi culpa entendí que no era yo quien escapaba. Todo el tiempo fuiste vos. Todo el tiempo vas a seguir escapando vos. ¿Pero sabes qué es lo peor? Que voy a seguir ahí, aunque no esté presente físicamente ni vos estes en mi vida cotidianamente. Siempre estoy pensando en vos. No hay distancia lo suficientemente grande como para modificar eso. Quiero dejar de luchar, quiero frenar. Estoy cansada de tu cobardía crónica. Estoy cansada de verte desperdiciar tu vida, y la mía. No me quedan más que expresiones de buenos deseos, pero has logrado convencerme de que no hay absolutamente nada que pueda hacer. Incluso si quiero permanecer a tu lado sin pedirte nada a cambio, sin imponerte condiciones o límites, te alejás. Estoy harta de las estrategias, de no saber qué decir ni qué pensar.  Sólo quería expresarte mis emociones, porque son lo único que tengo. Sólo quería hacerte saber -demostrarte- lo importante que sos en mi vida. Y es lo que hago. Continuamente demuestro interés por tu bienestar. Sólo quería que fueras parte de mi vida, sin importar el tipo de relación que eso implicara, pero no me lo estás haciendo demasiado fácil.

No hay comentarios:

Publicar un comentario